Vilma Bedia, una pastora misionera evangélica que se autodenomina “leona demócrata”, empleó en su oficina a sus tres hijos, su hermano, su sobrina, su nuera y cuñada.
El nepotismo es la preferencia que tienen algunos funcionarios públicos para dar empleos a algunos familiares o amigos, sin importar el mérito para ocupar el cargo, sino su lealtad o alianza.
En ese sentido, la senadora jujeña de La Libertad Avanza, Vilma Facunda Bedia, contrató a varios familiares en cargos de planta transitoria.
La funcionaria empleó en su oficina a sus tres hijos, su hermano, su sobrina, su nuera y cuñada. Por ejemplo, su hijo José Jair Mamani, con una A1,tendrá un sueldo de 1,2 millones de pesos. En tanto que su otro hijo, Joel Benjamín Mamani fue designado en la categoría A3 y percibirá un sueldo de unos $700.000.
La acción Bedia, una pastora misionera evangélica, que se autodenomina “leona demócrata”, va en contra mano a lo pregonado por el presidente Javier Milei, quien llegó a la Casa Rosada esbozando un discurso contra «la casta».
En las últimas semanas, el Poder Legislativo, por orden de Milei, retrotrajo los aumentos en las dietas del casi 30% en los legisladores nacionales. Además, el libertario echó del Poder Ejecutivo a los responsables del aumento automático en su sueldo y el de sus ministros.
Por esto, el Ejecutivo se quedó sin secretario de Trabajo, que estaba a cargo de Omar Yasin, y presentó su renuncia el lunes el secretario de Transformación del Estado, Armando Guibert.
En este contexto, Adorni fue consultado en su habitual conferencia de prensa y aseguró que el Gobierno está «absolutamente en contra de cualquier contratación o forma de utilización del Estado para intereses personales».