Cuarteles de toda la provincia se llegaron a las zonas afectadas por el fuego. De la región noreste, asistieron dotaciones de Río Primero, Monte Cristo, Los Chañaritos, Arroyito, Obispo Trejo y Villa Santa Rosa.
Los incendios forestales en Córdoba no dan tregua. Solo en cinco días se perdieron más de 16.000 hectáreas por los incendios forestales. El fuego se concentró en tres zonas: Chancaní, Villa Berna y Punilla.
Los focos que nacieron dentro del valle de Punilla en Capilla del Monte, San Esteban y Los Cocos en muchos casos fueron controlados por los bomberos. Pero el clima pudo más y se reavivaron una y otra vez, con las altas temperaturas, la baja humedad y las ráfagas de viento como factores determinantes.
Así el fuego se fue reproduciendo hasta llegar a pueblos vecinos como La Cumbre, San Marcos Sierras, Ascochinga y La Granja. Y a su camino ya destruyó flora, fauna, casas y complejos turísticos.
En ese desolador contexto, cuarteles de Bomberos de toda la provincia se llegaron a las zonas afectadas por el fuego. De la región noreste, asistieron dotaciones de Río Primero, Monte Cristo, Los Chañaritos, Arroyito, Obispo Trejo y Villa Santa Rosa.
Desde el cuartel de Río Primero tuvieron varios destinos, como Villa Berna, La Cumbre, Villa Alpina y Atos Pampa. Mientras que los bomberos de Monte Cristo se hicieron presentes en Capilla del Monte.
Por su parte, miembros del Cuerpo de Bomberos Voluntarios de Los Chañaritos durante el último fin de semana se desplazó hacia Cuchi Corral, uno de los puntos donde los incendios forestales han generado una situación crítica.
En tanto, una dotación de Arroyito se hizo presente en la localidad de La Granja, para colaborar en los siniestros.
Finalmente, los bomberos de Obispo Trejo y Villa Santa Rosa fueron convocados al foco que se desató en la zona de Ongamira.
Alrededor de 800 bomberos son parte de la lucha contra los incendios y aún quedan cuatro focos activos.






